29-11-2021
Libum se impuso de punta a punta en el Gran Premio Jockey Club – Copa UTTA-OSPAT, donde los trofeos los entregó nuestro Secretario General, Carlos Felice.
Domingo de fiesta en el Jardín de la República, con la jornada de carreras más esperada del año en el hipódromo de Tucumán, que contó con el apoyo de la Unión de Trabajadores del Turf y Afines (UTTA) en todos los aspectos. De hecho, nuestro Secretario General, Carlos Felice, fue quien entregó los trofeos en una de las citas más importantes de la temporada, el Gran Premio Jockey Club – Copa UTTA-OSPAT, cuyos 1400 metros fueron dominados de punta a punta por Libum, consagrado como el mejor potrillo del centro del país.
El pupilo de Nelson Salazar derrotó por tres cuerpos y medio a Tucumano en 1’24” 4/5 para redondear el tercer triunfo de su campaña, esta vez con el consagrado Osvaldo Alderete en su montura. La felicidad de todo el equipo del stud Don Villa, propietario del potrillo ganador, quedó en evidencia en la alegría y la emoción que convivieron en la ceremonia de entrega de premios. Para el jinete significó volver a casa para llevarse, además, todo el cariño.
“La UTTA estuvo presente en este magno evento acompañando a los trabajadores, el eslabón esencial en este resurgir de la actividad hípica. Por eso estuvimos compartiendo esta fiesta del turf federal junto a todas las compañeras y los compañeros. Para nosotros es un orgullo ver el resultado de tanto trabajo”, describió Felice, rodeado de trabajadores que se acercaban a saludarlo y a compartir sus experiencias conociendo la empatía del Secretario General y nuestra organización permanentemente con ellos, en todo el país. “Es un placer ver la realidad excepcional de la hípica tucumana, que es un modelo a imitar. Ha sido un evento notable de principio a fin. Nuestras felicitaciones a Carlos Cisneros y Rubén Moisello por su conducción, y a Mario Sosa Reto, nuestro delegado, por su destacado trabajo junto a los afiliados, que tienen sus derechos laborales, beneficios y apoyo dentro de un marco digno de inclusión y progreso”, agregó Felice.
La gran jornada, en un hipódromo resplandeciente, llegó a su pico en lo competitivo sobre el final, con el doblete en años consecutivos en el Gran Premio Batalla de Tucumán (2000 metros) de Arnoldo, el caballo que montado por Ángel Vai ganó por amplio margen en un excelente tiempo de 2’3” 3/5, apenas 1/5 por encima del récord de pista que ostenta Volynov desde 1978. Fue nuevamente el Rey en una carrera apasionante y en otra fiesta inolvidable.