Se impuso en las elecciones realizadas en el Jockey Club de Gualeguay; lugar donde hace cuatro años se desempeña en el área de Secretaria. Desde muy pequeña presenciaba con su familia las reuniones hípicas de su zona y hasta llegó a ser propietaria de caballos de carreras.
Cuando hay pasión por algo, tarde o temprano llegan los esperados frutos. Cynthia Acosta se convirtió en la delegada de personal del Jockey Club de Gualeguay (Entre Ríos), luego de conseguir el respaldo en las urnas por parte de sus compañeros de trabajo y se muestra muy predispuesta en ocupar esta reciente función.
“Es todo muy nuevo para mí. Es genial y lo considero una positiva etapa en mi vida laboral. El delegado anterior se está por jubilar y vi la posibilidad de postularme, indagué sobre el tema y lo acepté”, dice esta muchacha que por herencia familiar tiene un vínculo directo con el ámbito del turf.
“Todos los domingos con mi padre y hermanos íbamos a las diferentes reuniones de Entre Ríos. Nos conocemos todos los hipódromos de esta provincia. Hasta llegamos a ser propietarios de caballos de la larga distancia”, agrega y enseguida da otro dato que la une aún más con esta industria. “Mi marido tiene un tráiler y se encarga de transportar caballos”.
Ya había participado en la asamblea anual de la UTTA, que se realizó en el mes de junio en Buenos Aires. “Esa reunión fue el punto de partida para este presente”, finaliza Acosta. Conoce esta apasionante actividad y que mejor que trabajar en lo que tanto le gusta. Ahora le agregó otro compromiso y, sin dudas, que es un desafío de los lindos.
